En una carta pública distribuida a los medios, más de trescientas familiar manifestaron haber adquirido terrenos por medio de un loteo en forma privada con boletos de compraventa. Para la justicia no tendría ningún valor y ya comenzaron los procesos judiciales de desalojo.
“Las primeras familias que compraron los terrenos están desde hace más de dieciséis años, y ahora tomamos conocimiento que dicho loteo no tenía aprobación municipal, ni autorización para su venta”, comentaron.
Los vecinos solicitaron al Intendente Jofré que “tome intervención para que el Concejo Deliberante expropie los terrenos en conflictos y que la municipalidad nos adjudique, ya que sería la única posibilidad de poder conservar nuestros hogares”.
“De no mediar la ayuda del estado en esta situación de vulnerabilidad habitacional, sumado a la crisis económica y la falta real de trabajo no tendremos adonde ir a vivir con nuestro hijos y ancianos”, expresaron con preocupación.
“Vamos a golpear las puertas de todos nuestros representantes para que nos den una solución al problema, porque nosotros no somos usurpadores, compramos los lotes y fuimos estafados”, insistieron.
Además, indicaron que “esto no hubiera pasado si la municipalidad se hubiera hecho presente en nuestro barrio hace 16 años atrás cuando comenzaron a vender, y nos ponían en conocimiento de que no tenían aprobación ni autorización para hacerlo”.
“Fuimos estafados por personas inescrupulosas que se aprovecharon de nuestras necesidades de tener una casa donde vivir con nuestros hijos, y el estado no hizo nada”, aseguraron.
“Ahora le pedimos que nos den una solución para que no nos desalojen, que expropien y normalicen esta situación”, culminaron.
